Los hechos recientes en torno al caso Antonia y la formalización de Martín Pradenas por múltiples acusaciones de abuso sexual y violación, han intensificado en la última semana la movilización feminista y las alertas que desde nuestras diferentes posiciones tenemos respecto del compromiso firme por la eliminación de todas las formas de violencias y discriminaciones contra las mujeres.
22 Julio 2020
Conscientes de que estos eventos no son ajenos a nuestra agenda de trabajo en la UDP, ni a nuestra agenda como feministas, el Departamento de Género quiere reafirmar su compromiso ineludible con avanzar en todas las transformaciones necesarias para garantizar una experiencia libre de violencia en la comunidad UDP, seamos estudiantes, docentes o funcionarias(os). El desafío es grande, sabemos que tenemos deudas importantes y muchas brechas por subsanar.
Queremos señalar que la situación, ya de conocimiento público, del caso Antonia no es un hecho que resulte ajeno a la realidad estudiantil UDP. La comunidad universitaria debe saber que relatos (y denuncias) de situaciones de abuso sexual y/o violación en contextos de fiestas o reuniones, donde puede haber (o no) consumo de sustancias (alcohol y/o drogas) no son la excepción, sino que lamentablemente, son la regla. En la mayoría de los casos, entre un estudiante hombre y una estudiante mujer, en otros, entre estudiantes varones. Es decir, esta es una realidad frecuente para nuestros/as estudiantes.
Por ello, invitamos particularmente a los estudiantes varones de nuestra comunidad a reflexionar seriamente y evaluar sus comportamientos respecto a cómo se vinculan tanto sexo-afectivamente como en comunidad. En este sentido, apelamos a que los cuestionamientos actuales sobre lo que significa “ser hombre” en nuestra sociedad no impacten solo en quienes agreden, sino también en la amplia mayoría de quienes, aun rechazando internamente cualquier situación de discriminación y violencia, mantienen silencio y/o sostienen un rol como observadores, colaborando así en la reproducción de una cultura que valida chistes sexistas, compartir imágenes privadas y/o sexualizadas sin consentimiento con el objetivo de humillar o en que un abuso sexual, en una reunión entre amigos/as, tenga posibilidad de ocurrir.
Como bien se ha señalado en torno al caso Antonia, no existe sexo (prácticas sexuales) con o sin consentimiento. Si es sin consentimiento, es violación.
Al respecto, nuestra Normativa estipula en el artículo 7 que “El consentimiento se entiende como el acuerdo o aceptación de participar en una actividad sexual específica. Este se manifiesta de manera inequívoca mediante palabras o actos concluyentes de una persona que está en condiciones de consentir y se encuentra en pleno uso de sus facultades. Diversos factores impactan en cómo el consentimiento es dado y recibido, incluyendo las dinámicas de desigualdad de poder. Dado que el consentimiento no puede ser obtenido en circunstancias de amenaza, coerción de cualquier tipo o la fuerza, acuerdos obtenidos en estos contextos no constituyen consentimiento”.
Y en el artículo 8 agrega que “El consumo de alcohol y/o de drogas podría reducir, e incluso eliminar la posibilidad de consentimiento” y entonces “el hecho de encontrarse bajo la influencia del alcohol o de drogas, no exime de responsabilidad a quien incurre en conductas de violencia sexual, así como tampoco podrá presumirse la aceptación de la conducta por parte de la persona afectada por ésta”.
Para una explicación sencilla del consentimiento, sugerimos ver este video AQUI.
RECURSOS Y APOYOS DISPONIBLES
Integrantes de la comunidad UDP que hayan sufrido una agresión sexual (u otra conductas tipificadas en la Normativa) pueden siempre denunciar por la Normativa de Prevención y Sanción de Acciones de Discriminación, Violencia Sexual y/o de Género. Aun cuando los hechos sucedieran fuera del ámbito de aplicación, la denuncia permite solicitar medidas de protección (medidas de no contacto, separación de sección, medidas de flexibilidad académica) y permite acceder a apoyo terapéutico sin costo. Asimismo, la sola presentación de la denuncia constituye un acto que le comunica a la persona denunciada que lo ocurrido es una agresión, que no ha pasado inadvertido y que debe rendir cuentas.
Igualmente, el Departamento de Género tiene un convenio suscrito con Fundación Probono, organización sin fines de lucro que entrega orientación jurídica sin costo. En los casos donde haya delito, voluntad de la víctima de avanzar y se cumplan algunos criterios (establecidos por Probono), el caso puede ser derivado para patrocinio jurídico sin costo por alguno de los estudios jurídicos asociados a esta entidad.
Para consultar las definiciones importantes, las preguntas frecuentes y acceder a la Normativa completa, visitar genero.udp.cl
Asimismo, contactarse con el DG para recibir orientación o con cualquier integrante de nuestra Red de Consejería (toda la información de contacto en genero.udp.cl).
Las Facultades también cuentan con SESEGEN (Secretarías de Sexualidad y Género), organizaciones estudiantiles que también buscan avanzar en erradicar las situaciones de discriminación y violencia, así como educar y sensibilizar, a quienes también pueden contactar.
Para estar informada/o sobre las actividades realizadas por el Departamento de Género, tales como campañas de prevención, desarrollo de talleres y/o seminarios en relación a este y otros ejes de trabajo, sigue la cuenta de Instagram @genero_udp
