El Departamento de Género fue convocado a formar parte de las Mesas Participativas que lidera el MINEDUC con diversas áreas de interés respecto a la elaboración de un nuevo proyecto de ley que busca garantizar una Educación Integral Sexual para todas las infancias y adolescencias. Nicole Murillo, profesional del Departamento de Género, participó de tres reuniones.
Se constituyeron varias mesas en simultáneo, con personas que provienen de diversas áreas, tales como las organizaciones civiles de diversidad sexual, géneros y VIH y de algún ámbito de interés relacionado con la sexualidad, iglesias y organizaciones espirituales, organizaciones relacionadas con educación y, por último, personas del ámbito académico que fue en la que participó el Departamento de Género.
La conversación en la mesa académica estuvo orientada a realizar diagnósticos a partir de nuestro trabajo en torno a tres ejes claves: Elaboración de propuesta y política curricular, Formación inicial y desarrollo profesional de trabajadoras/es de la educación con enfoque de género e Incorporación de familias, tutores/as y apoderados/as en la educación en afectividad y sexualidad integral que recibirán niñas, niños y adolescentes.
Es sabido que un tema tan complejo como la educación en sexualidad, en que se entrecruzan ideologías, construcciones culturales y sobre todo temores, requiere de un esfuerzo sostenido y significativo por enfatizar su enfoque de derechos. La UNESCO (2019) en su informe sobre la situación de la educación sexual en nuestro país señalan su insuficiencia y excesiva descentralización que desiguala las condiciones de acceso en tanto establece flexibilidad cada Establecimiento Educacional para su abordaje.
Pese a la profunda necesidad que como Institución de Educación Superior diagnosticamos, se prevé un panorama desalentador en cuanto aprobación de dicho proyecto de ley, dada la conformación mayoritariamente conservadora del actual Congreso y los antecedentes de dos fallidos intentos de proyectos de ley, el último de ellos del 2020.
Por consiguiente, este proyecto de ley se está construyendo desde un enfoque participativo de las familias en torno a la educación sexual, reconociendo en quienes coeducan saberes necesarios de incorporar. Ahora bien, queda mucho por desarrollar y las condiciones de dicha participación son asunto por resolver por parte del Mineduc.
Por nuestra parte, como Instituciones de Educación Superior tenemos un compromiso público que se materializa en el proceso de transversalización del enfoque de género, que no sólo implica la necesaria erradicación de la violencia como piso mínimo, sino que, además se manifieste en una formación profesional con saberes y actitudes igualitarias e inclusivas. Es por ello que avanzar en la transformación de las universidades, posibilitará, en específico, la formación de trabajadoras/es de la educación que estén a la altura de una Educación Sexual Integral en los Establecimientos Educacionales de todo el país.
Como Departamento de Género, durante este año, precisamente diagnosticando y respondiendo a la necesidad emergente de espacios de formación y diálogo, realizamos cuatro versiones del Programa Ciudadanía, géneros y diversidad dirigido a todo el estudiantado UDP y a trabajadoras/es que aborda desde un enfoque participativo y cercano la Educación Sexual Integral.
16 Diciembre 2022
